Son varios los tipos de piscinas que puedes elegir cuando deseas instalar una para pasar los mejores veranos. Es importante que antes de tomar cualquier decisión te informes y después, decidas cuál satisface tus necesidades. Llegó el verano y las altas temperaturas son un estímulo importante para tener tu piscina propia. Aquí te mostraremos todas las alternativas que encontrarás y cuáles son sus características. Entonces, te invitamos a sumergirte en este artículo.
Tipos de piscinas. Opciones para construir una piscina
Hay una gran cantidad de piscinas que se clasifican por su tamaño, su funcionalidad, su material y su precio. Aquí vamos a enfocarnos en los aspectos más importantes de los tipos de piscinas. Lógicamente, todas son funcionales para familias o para comunidades. En lo único que pueden diferenciarse es en el tamaño y el material. Las piscinas de comunidades siempre deben ser más grandes y resistentes. Aquí te presentamos todas las alternativas.
Piscinas tipo elevado
Estas son piscinas prefabricadas que no requieren de grandes inversiones para su instalación. Por lo general, traen las instrucciones para instalarlas. Su desventaja puede ser que deben armarse cuando empieza el verano y desarmarse cuando termina. Esto para resguardar la integridad de su estructura. Se trata de piscinas que tienen un periodo más corto de vida que las de suelo.
Piscinas de suelo
En España son las más comunes. Estas son conocidas como piscinas de obra porque requieren de la apertura de un hueco en el suelo para instalarlas. Por este motivo sus costes son más altos pero su vida útil es muy larga.
Tipos de piscinas según el material
Ahora hemos llegado a uno de los puntos más importantes en la elección de una piscina: su material. En este tema tienes mucho de donde elegir. Aquí te contamos todo lo que puedes encontrar en el mercado:
Hinchable
Es muy fácil y rápida de instalar. Llenarlas de aire no es muy complicado porque usualmente vienen con una bomba eléctrica o manual. Es perfecta para instalar sobre cualquier superficie. Eso sí, la única condición que debes verificar es que el suelo esté completamente liso y sea resistente.
Este tipo de piscina es fácil de limpiar y mantener. Pero, su durabilidad es relativamente corta a comparación de piscinas de otros materiales. Además, encontrarás de distintos tamaños. Es ideal si alquilas una vivienda y necesitas trasladar la piscina en caso de mudanza. Estas piscinas pertenecen a las de tipo elevado.
Piscinas de poliéster y fibra de vidrio
Si buscas piscinas de una sola pieza entonces esta es la tuya. Se encuentran dentro de la clasificación de piscina de suelo. Dentro de este grupo son de las más económicas. Adicionalmente, puedes elegir distintas formas dependiendo de tus gustos y necesidades.
En este caso hay que cavar el hueco con la forma de la piscina que elijas. Su gran ventaja es que puede instalarse en sólo unos días. Igualmente su cuidado debe ser permanente la uses o no durante todo el año.
Generalmente pueden llevar elementos adicionales como sistema para hidromasaje, escaleras, cubiertas y un sistema para el filtrado del agua. Además, suelen tener iluminación con fibra óptica.
Una de las desventajas de las piscinas de poliéster es que deben permanecer llenas de agua siempre. ¿La razón? Tienen sensibilidad a los factores climáticos.
Tipos de piscinas de acero inoxidable
Las piscinas de acero tienen paneles tipo modular que son prefabricadas. Estas se diseñan acorde al tamaño elegido por el cliente. Su acabado es similar al de una piscina de hormigón. Una vez cavado el hueco e instalados los paneles se hace un revestimiento doble de pvc. Estas piscinas son más resistentes que las del punto anterior.
Otra de sus ventajas es que son muy fáciles de limpiar gracias a su material. También son muy estéticas y rápidas de instalar. Puedes elegir entre una buena cantidad de diseños. Se adaptan perfectamente a toda clase de terrenos. ¿Quieres una piscina muy duradera? Esta es la ideal.
La única desventaja que pueden tener son sus costes que son más elevados a las anteriores opciones que te hemos dado. Además, debido a su material son conductoras eléctricas, por lo que se recomienda estar lejos de este tipo de fuentes.
Piscinas de hormigón
Esta son las piscinas más comunes y generalmente están construidas sobre una base y muros de hormigón. Estos tipos de piscinas son hechas a medida y gusto del cliente. Dependiendo de la calidad de material se puede decir que son las piscinas más duraderas. Su acabado se realiza con revestimientos vítreos. No se altera con el tiempo y su sensación al tacto es ideal.
La construcción de piscinas de hormigón suelen llevar un periodo largo de tiempo porque se desarrolla por etapas. Hay que diseñar, excavar, instalar piezas de acero y fontanería, ajustar los equipos y aplicar el hormigón. Además, después hay que colocar las baldosas y realizar los acabados. Con estas piscinas puedes dejar volar tu creatividad y hacer lo que quieras.
Esperamos que puedas tener la piscina de tus sueños. Aquí contamos con todos los tipos de piscinas para que elijas la que se ajuste a tu gusto y presupuesto. ¡A nadar!