La ósmosis es un proceso que se da de forma continua en la naturaleza, y que se ha incorporado a distintos procesos industriales, además de al filtrado de agua en el hogar. En el hogar el proceso es algo complejo, más adelante hablaremos de las 5 etapas de la ósmosis inversa.

Cómo funciona el proceso de ósmosis

En la naturaleza, cuando dos flujos de agua con distinto nivel de sales en suspensión se encuentran separados por una membrana porosa, se da la ósmosis. La ósmosis natural, también llamada ósmosis directa, consiste en un flujo del agua con más sales hacia la otra hasta igualar la salinidad de ambas. Cuando lo que se busca es el proceso inverso, que sea el agua menos salina la que pierda el resto de sales, se da ósmosis inversa. A diferencia de la ósmosis directa, la inversa no es un proceso natural, sino que se realiza mediante presión. Se aplica presión al flujo de agua más impuro, de manera que el agua pasa a gran velocidad por la membrana, ya limpia.

Aplicaciones de la ósmosis inversa

Dada la manera cómo funciona el proceso de ósmosis inversa, actualmente se usa para purificar el agua en el hogar mediante un sistema de filtros. La presión con la que el agua sale del grifo suele ser suficiente, aunque a veces esta se aumenta con una bomba de agua. Otras aplicaciones de la ósmosis inversa, en la industria, son:

  • Desalinización de agua de mar.
  • Producción de agua ultrapura para ciertas industrias.
  • Descontaminación de aguas urbanas e industriales.

Etapas de ósmosis inversa en los equipos domésticos

El proceso de ósmosis inversa tiene varias etapas, que básicamente se identifican por los distintos filtros que se usan en ellas.

Etapa 1: de filtro de sedimento

La primera de las etapas de ósmosis inversa es un filtro de prolipopileno poroso que retiene las impurezas más grandes. En esta primera etapa del proceso de ósmosis inversa el agua se limpia superficialmente. Sólo se filtra lo que es visible habitualmente: arena, limo, restos vegetales…

Etapa 2: filtro de carbón activado

La segunda de las etapas de ósmosis inversa implica el paso del agua por un filtro de carbón activado. Este segundo filtro es el que elimina los sabores, olores y contaminantes químicos incluidos en el agua. Tras pasar por este filtro el agua ya o contiene nada que se pueda ver sin un microscopio.

Etapa 3: filtro combinado con carbón activado

La tercera de las fases de ósmosis inversa también es de carbón activado, pero no poroso sino lleno de cavidades y canales. Cabe señalar que este filtro retiene los químicos nocivos para el organismo. Algunos de esos químicos son el cloro o los pesticidas. La función del tercer filtro es sanear el agua y evitar que pueda dañar a quien la beba.

Etapa 4: membrana semipermeable

La cuarta de las etapas de ósmosis inversa es la que mejor imita la ósmosis natural. En este caso el filtro es una membrana semipermeable, similar a las de raíces, hojas… Esa membrana actúa reteniendo las bacterias y otros organismos microscópicos presentes en el agua.

Etapa 5: post filtro GAC

La quinta y última de las etapas de ósmosis inversa vuelve a tener un filtro de carbón activado, cuyo objetivo es dotar al agua un sabor fresco.

Las etapas en los equipos industriales de desalinización

Cuando la ósmosis inversa se usa para desalinizar agua en instalaciones industriales, se trata sólo de una parte del tratamiento, la parte central. Porque antes de la osmósis, el agua recibe un pretratamiento, orientado a prevenir todos aquellos posibles daños que sufrirán los filtros. Para ello, durante ese pretratamiento se realizan una serie de operaciones:

  • Cloración para interrumpir el desarrollo de flora y fauna microópica.
  • Eliminación de las micropartículas presentes en el agua.
  • Filtraciones y microfiltraciones para limpiar el agua.
  • Acidificación para reducir el PH del agua.
  • Decloración, ya que una vez el cloro ya no es necesario hay que evitar que dañe los filtros.
  • Desgasificación previa, para reducir la cantidad de CO2 en el agua.

Además el proceso industrial más complejo termina con un pos-tratamiento en el que el agua salinizada es clorada de nuevo.

Beneficios de la ósmosis inversa

Los beneficios de usar sistemas de ósmosis inversa en el hogar y en la industria son, básicamente, los siguientes:

  • En primer lugar, conseguimos un elevado porcentaje de retención de los contaminantes del agua. Porque el agua resultante es de gran calidad, con un sabor muy bueno y apta para el consumo humano.
  • Al ser un sistema de filtrado físico, no utiliza químicos.
  • También resulta bastante económico y de mantenimiento sencillo. Los recambios para los filtros se pueden adquirir en muchas grandes superficies. No hay que acudir a ningún establecimiento especializado.
  • El filtrado de las impurezas alarga la vida útil de las tuberías. Esto es así porque que evita la acumulación de sedimentos.
  • Además el aparato es pequeño, sencillo de utilizar y poco aparatoso. Se puede meter dentro de cualquier armario y se conecta fácilmente a la red de agua del hogar.